Cualquier persona puede desarrollar acné, pero el acné quístico tiende a aparecer en personas con piel grasa, adolescentes, mujeres y adultos mayores con desequilibrios hormonales.
El acné quístico se desarrolla cuando los quistes se forman profundamente debajo de la piel. Esto puede ser el resultado de una combinación de bacterias, aceite y células secas de la piel que quedan atrapadas en los poros.
Este tipo de acné mejor mejorar con la edad pero suele ser muy doloroso y difícil de tratar. Por eso, si sospechas que tienes acné quístico, debes acudir a un profesional de la salud. Estos te pueden recetar el medicamento necesario para ayudar a limpiar tu piel.
¿Cómo identificar el acné quístico?
- Es la forma más grave de acné.
- A menudo se ve como forúnculos en la piel.
- Están llenos de pus.
- Gran protuberancia blanca
- Es más profundo dentro de la piel. Todos los demás tipos parecen descansar sobre la superficie de la piel.
- Rojez
- Sensible o doloroso al tacto.
Son también comunes en el pecho, el cuello, la espalda y los brazos e incluso desarrollarse en los hombros y detrás de las orejas.
Imagen del acné quístico
Tratamiento
Primero que todo es importante que entiendas que este acné es sumamente fuerte, por esa razón, debes acudir a un dermatólogo y, que dependiendo del tipo de tratamiento, es posible que veas o no resultados.
Ya sabiendo esto, te hablaremos de unos de los posibles tratamientos.
Isotretinoína
La isotretinoína (Accutane), es un poderoso medicamento. Se considera la medida de tratamiento más efectiva para el acné quístico.
Según Healthline, el 85 % de las personas que lo toman experimentan mejoras dentro de cuatro a seis meses.
Antibióticos orales
Se pueden usar antibióticos orales para tratar el acné quístico si cubren una gran área del rostro. Pero, toma en cuenta que los antibióticos no alivian el exceso de grasa ni las células muertas de la piel.
Además, solo deben usarse a corto plazo, debido a las preocupaciones sobre la resistencia bacteriana.
Retinoides tópicos
Los retinoides tópicos también se derivan de la vitamina A. Suelen ser utilizados junto con antibióticos tópicos para hacerlos más efectivos.
Espironolactona
La espironolactona (Aldactone) es otra posible medida de tratamiento para el acné quístico. Puede funcionar al controlar el exceso de niveles de andrógenos que podrían estar contribuyendo al acné inflamatorio.
Un estudio del 2012 descubrió que las dosis de 50 a 100 miligramos (mg) por día funcionan mejor.
Anticonceptivos orales
Los anticonceptivos orales son una opción viable para el acné quístico en algunas mujeres. Este método es especialmente efectivo si tiende a desarrollar quistes de acné durante las fluctuaciones hormonales relacionadas con su ciclo menstrual.
